Feedback
What do you think about us?
Your name
Your email
Message
Los principios y valores de la doctrina social de la Iglesia Católica enfatizan la dignidad humana y el bienestar social. La verdad, la libertad, la justicia y el amor son pilares que guían la convivencia y el desarrollo humano. Estos valores influyen en la reforma de estructuras sociales y promueven la transparencia, la responsabilidad y la solidaridad para una paz duradera.
Show More
Los principios y valores promovidos por la doctrina social de la Iglesia Católica buscan proteger y promover la dignidad humana
Verdad
La verdad es esencial para una sociedad basada en el orden, la productividad y el respeto a la dignidad humana
Libertad
La libertad es un derecho natural que debe ser protegido y ejercido en armonía con la verdad y la justicia
Justicia
La justicia es un valor fundamental que se manifiesta en el respeto a los derechos y la dignidad de cada persona
Las virtudes y actitudes morales son esenciales para el desarrollo humano integral y reflejan la dignidad intrínseca de cada persona
La Iglesia respeta la autonomía de las realidades seculares, pero ofrece orientación moral para asegurar que las decisiones humanas reflejen y fortalezcan los valores fundamentales
Los valores y principios promovidos por la doctrina social de la Iglesia sirven como guía para quienes ejercen el poder, influyendo en la reforma de estructuras económicas, políticas, culturales y tecnológicas
La doctrina social de la Iglesia no solo exige la aplicación de principios éticos universales, sino también la práctica constante de virtudes y actitudes morales
Una sociedad basada en la verdad es esencial para el orden, la productividad y el respeto a la dignidad humana
La resolución de problemas sociales de acuerdo con la verdad evita la arbitrariedad y se alinea con una moralidad objetiva y universal
En la era contemporánea, se enfatiza la necesidad de un esfuerzo educativo para fomentar la verdad en todos los ámbitos de la vida, especialmente en la comunicación y la economía
La libertad es un reflejo de la imagen divina en el ser humano y constituye un derecho natural que debe ser reconocido y protegido por la sociedad
La libertad se realiza en su plenitud cuando se ejerce en armonía con la verdad y la justicia
La libertad conlleva la responsabilidad de actuar dentro de los límites del bien común y de rechazar lo moralmente inaceptable, promoviendo así el desarrollo personal y social hacia el bienestar universal