Etapa 2: Autonomía versus Vergüenza y Duda (18 meses-3 años)
En la segunda etapa, los niños comienzan a desarrollar autonomía a medida que adquieren nuevas habilidades motoras y cognitivas. Entre los 18 meses y los 3 años, los niños se vuelven más independientes y empiezan a afirmar su voluntad. Un entorno que alienta y apoya la exploración y la toma de decisiones fomenta la autonomía y la confianza en uno mismo. En contraste, un entorno restrictivo o crítico puede llevar a sentimientos de vergüenza y duda, socavando la autoestima y la independencia del niño.Etapa 3: Iniciativa versus Culpa (3-5 años)
La tercera etapa se caracteriza por un aumento en la iniciativa, donde los niños de 3 a 5 años se vuelven más asertivos y toman la iniciativa en la creación de juegos y actividades. Un ambiente que estimula la iniciativa y ofrece oportunidades para el liderazgo y la creatividad promueve un sentido saludable de propósito y responsabilidad. Sin embargo, si los niños son reprimidos o castigados excesivamente por sus esfuerzos, pueden desarrollar sentimientos de culpa y autocensura, lo que limita su capacidad para tomar la iniciativa en el futuro.Etapa 4: Laboriosidad versus Inferioridad (5-13 años)
Durante la etapa de laboriosidad versus inferioridad, que abarca desde los 5 hasta los 13 años, los niños se enfrentan a desafíos académicos y sociales más complejos. El reconocimiento de sus logros y habilidades por parte de los adultos y compañeros es crucial para el desarrollo de un sentido de competencia y autoeficacia. La falta de reconocimiento o el fracaso repetido pueden llevar a sentimientos de inferioridad y a la renuencia a participar en actividades desafiantes, lo que puede afectar negativamente su desarrollo y autoestima.Etapa 5: Identidad versus Confusión de Identidad (13-21 años)
La adolescencia es el escenario de la quinta etapa, donde los jóvenes buscan definir su identidad personal y social. Este período crítico de exploración de roles y valores personales es esencial para el desarrollo de una identidad coherente y estable. Los adolescentes que logran una integración exitosa de sus roles y valores emergen con una fuerte sensación de identidad. Aquellos que no logran esta integración pueden experimentar confusión y una falta de dirección en sus vidas, lo que puede afectar su transición a la adultez.Etapa 6: Intimidad versus Aislamiento (21-39 años)
La sexta etapa se centra en la capacidad de los adultos jóvenes para formar relaciones íntimas y compromisos a largo plazo. La resolución exitosa de conflictos anteriores permite a los individuos establecer relaciones significativas y mantener un sentido de conexión con los demás. El fracaso en esta etapa puede llevar al aislamiento, la soledad y la incapacidad para formar o mantener relaciones cercanas, lo que puede tener un impacto negativo en la calidad de vida y el bienestar emocional.Etapa 7: Generatividad versus Estancamiento (40-65 años)
En la etapa de generatividad versus estancamiento, los adultos de mediana edad se esfuerzan por contribuir a la sociedad y guiar a la próxima generación. La generatividad se manifiesta en la crianza, la enseñanza y la producción creativa, y proporciona un sentido de propósito y conexión. La falta de oportunidades para ser productivos o la sensación de no haber logrado metas importantes puede resultar en estancamiento y una crisis de significado en la vida.Etapa 8: Integridad del Ego versus Desesperación (65 años en adelante)
En la última etapa de la teoría de Erikson, las personas mayores reflexionan sobre su vida y buscan encontrar un sentido de integridad y realización. Aquellos que ven sus vidas como significativas y llenas de logros experimentan integridad del ego, lo que les permite enfrentar el final de la vida con sabiduría y aceptación. Por otro lado, aquellos que sienten remordimientos o insatisfacción pueden experimentar desesperación, lo que puede llevar a la depresión y al descontento en sus años finales.