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El liberalismo económico y la Revolución Industrial transformaron la sociedad, creando una nueva estratificación de clases y fomentando la lucha por derechos laborales. La emergencia de la burguesía y el ascenso del proletariado dieron lugar a movimientos obreros y a ideologías como el socialismo y el anarquismo, buscando una sociedad más justa.
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Adam Smith argumentó que los mercados libres y la competencia conducen a una asignación eficiente de recursos
Desafíos del crecimiento poblacional
Thomas Malthus enfatizó los desafíos del crecimiento poblacional en su teoría económica
Distribución de la renta
David Ricardo analizó la distribución de la renta en su teoría económica
John Stuart Mill abogó por la intervención estatal en la educación y la redistribución de la riqueza para promover la justicia social
La Revolución Industrial transformó la estructura estamental en una sociedad de clases basada en la economía de mercado
La burguesía se convirtió en la clase social predominante en Europa occidental, ejerciendo influencia en la economía y la política
Las clases medias se diversificaron e incluyeron a profesionales, técnicos y pequeños comerciantes en la sociedad de clases
Las clases trabajadoras enfrentaron condiciones laborales extremadamente duras durante la Revolución Industrial, incluyendo largas jornadas de trabajo y bajos salarios
La burguesía promovió ideales de individualismo, trabajo duro y ahorro en la sociedad
La burguesía a menudo veía la pobreza como resultado de la falta de esfuerzo, pero también se involucraba en obras de caridad y asistencia social
La familia burguesa se caracterizaba por una estructura patriarcal, donde el hombre controlaba los recursos económicos y la mujer se dedicaba a la gestión del hogar y a una educación orientada hacia el matrimonio y la maternidad
El proletariado estaba compuesto por trabajadores que no poseían medios de producción y dependían de salarios para subsistir
El proletariado enfrentó largas jornadas de trabajo, bajos salarios y falta de seguridad laboral durante la Revolución Industrial
Las mejoras en las condiciones laborales y de vida se lograron progresivamente gracias a la labor de reformadores sociales, la creación de sindicatos y la acción política colectiva