La educación socioemocional se centra en el autoconocimiento y la autorregulación, habilidades clave para el desarrollo integral de los estudiantes. Estas competencias permiten una mejor gestión emocional y toma de decisiones responsables, influyendo positivamente en el bienestar individual y social. La apreciación y gratitud también juegan un rol importante, mejorando el bienestar psicológico y fomentando actitudes altruistas y sostenibles. La autonomía se destaca como un pilar para actuar con propósito y contribuir al bienestar colectivo.
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El autoconocimiento implica conocer nuestras emociones, motivaciones, fortalezas y debilidades
El autoconocimiento nos ayuda a aprender y superar desafíos personales y académicos
El autoconocimiento debe ser fomentado en el ambiente educativo
La autorregulación implica manejar nuestras emociones de forma consciente y adecuada
La autorregulación nos ayuda a comprender cómo nuestras acciones afectan a nosotros y a los demás
La autorregulación es esencial para desarrollar la autonomía y tomar decisiones responsables
La apreciación consiste en reconocer y valorar lo positivo en nosotros, los demás y el entorno
La apreciación nos hace sentir agradecidos
La apreciación nos beneficia emocionalmente y nos motiva a cuidar y proteger lo que valoramos
El bienestar es más que felicidad o satisfacción personal
El bienestar abarca ser, estar, hacer y convivir
En la educación, es importante entender cómo las dimensiones socioemocionales afectan nuestro bienestar y el de la sociedad
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Componentes de la educación socioemocional
Incluye autoconocimiento, autorregulación, motivaciones, emociones, fortalezas y debilidades.
01
Impacto de la autorregulación en la conducta
Permite gestionar emociones, influir en acciones propias y efectos en otros.
02
Beneficios de la socioemocional en la toma de decisiones
Fomenta autonomía personal y elecciones responsables en diversos contextos.
