Obligaciones del Empleador en Materia de Riesgos del Trabajo

Obligaciones del Empleador en Materia de Riesgos del Trabajo

Los empleadores están obligados por ley a garantizar la seguridad y salud de sus trabajadores frente a accidentes laborales o enfermedades profesionales. Para ello, deben contratar una Aseguradora de Riesgos del Trabajo (ART) o, en su defecto, autoasegurarse, asegurando así la cobertura necesaria. Las ART son entidades que proporcionan las prestaciones definidas por la Ley de Riesgos del Trabajo, aplicable a empleados del sector privado y público, incluyendo a aquellos que desempeñan servicios de carga pública. La ley tiene como objetivos fundamentales indemnizar los daños derivados de accidentes o enfermedades laborales, promover la prevención de riesgos, facilitar la reinserción laboral de los trabajadores afectados y estimular la negociación colectiva para el mejoramiento de las condiciones de seguridad y salud en el trabajo.

Definición y Tipos de Accidentes de Trabajo

Un accidente de trabajo, según la Ley 24.557, es un evento súbito y violento que se produce por el trabajo o en ocasión de este, incluyendo el trayecto entre el domicilio y el lugar de trabajo, siempre que no se desvíe por razones personales. Se distinguen dos categorías principales: los in itinere, que ocurren en el trayecto mencionado, y los accidentes propiamente dichos, que suceden en el tiempo y espacio de trabajo. Ambos son reconocidos por la ley como accidentes laborales y se caracterizan por ser imprevistos y causar lesiones o trastornos de salud inmediatos.

Factores de Riesgo en el Ambiente Laboral

Los factores de riesgo laborales son variados y pueden ser de índole técnica, como maquinaria sin las protecciones adecuadas, herramientas defectuosas, infraestructuras inseguras, indumentaria inapropiada y señalización insuficiente. También existen factores humanos, que pueden ser responsabilidad del empleador, como el mantenimiento inadecuado de las instalaciones o la falta de formación en prevención de riesgos, o del empleado, como el incumplimiento de las normativas de seguridad o el uso incorrecto de equipos. Adicionalmente, factores sociales como remuneraciones inadecuadas y conflictos laborales pueden incidir negativamente en la seguridad y salud en el trabajo.

Reconocimiento y Resarcimiento de Enfermedades Profesionales

Las enfermedades profesionales son afecciones que tienen una relación directa con el ejercicio de una profesión o actividad laboral específica. La Ley 24.557 establece un listado de enfermedades profesionales, especificando el agente de riesgo, los síntomas y las actividades que las provocan. Aquellas patologías no incluidas en el listado pueden ser reconocidas como enfermedades laborales solo bajo ciertas condiciones establecidas por la Comisión Médica Central. La ley también establece que no se indemnizarán los accidentes o enfermedades ocasionados por negligencia grave del trabajador o por eventos de fuerza mayor externos al ámbito laboral.

Grados de Incapacidad Laboral Derivados de Accidentes y Enfermedades

Los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales pueden conllevar distintos niveles de incapacidad laboral. La incapacidad temporal implica una inhabilitación provisional para realizar las tareas habituales, que finaliza con el alta médica. La incapacidad permanente se refiere a secuelas definitivas que impiden la reincorporación al puesto de trabajo anterior, como la pérdida de una extremidad o la visión, o una condición que persiste más de un año. La determinación del grado de incapacidad y la correspondiente indemnización son establecidas por la comisión médica competente.