Primeros meses

La falta de reacción a sonidos fuertes o a la voz de los padres puede indicar una posible hipoacusia

Entre 3 y 6 meses

La ausencia de reacciones a sonidos cotidianos o la falta de orientación hacia fuentes sonoras son motivos de preocupación

Conforme el niño crece

La no emisión de balbuceos, la falta de respuesta al ser llamado por su nombre y la dificultad para reconocer palabras comunes son indicativos de problemas auditivos

Generación de sonidos inesperados

Los docentes pueden aplicar este método para observar la reacción del estudiante

Llamado al niño por su nombre desde distintas ubicaciones

Este método permite verificar si hay orientación hacia el sonido

Preguntas inesperadas durante una conversación

Este método evalúa la atención y comprensión auditiva del estudiante

Personalización de las intervenciones educativas

Es crucial tener en cuenta el tipo y grado de pérdida auditiva del alumno para ofrecer intervenciones educativas personalizadas

Áreas de intervención

Se deben trabajar habilidades comunicativas, atención y memoria, orientación espacial y percepción musical en áreas como lenguaje, matemáticas, educación física y música

Adaptación continua de sistemas aumentativos y alternativos de comunicación

Los sistemas de comunicación deben ser adaptados constantemente para facilitar la comunicación efectiva con el estudiante

Etapas del desarrollo del lenguaje

El desarrollo del lenguaje en niños con hipoacusia se realiza en etapas, comenzando con la estimulación de la vocalización y el uso de objetos reales

Ampliación del vocabulario y estructuras gramaticales

Se deben trabajar en la ampliación del vocabulario y estructuras gramaticales a medida que el niño avanza en su desarrollo del lenguaje

Uso de sistemas aumentativos y alternativos de comunicación

Estos sistemas deben ser adaptados continuamente para facilitar la comunicación efectiva con el niño