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La evolución biológica es un proceso de cambio genético en poblaciones, impulsado por la selección natural, mutaciones y otros mecanismos. Estos cambios heredables permiten la adaptación y diversificación de especies, resultando en variaciones morfológicas y fisiológicas significativas, como la capacidad de realizar la fotosíntesis o el desarrollo de la visión binocular. La herencia de estos cambios es crucial para la evolución continua de la vida en la Tierra.
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La evolución biológica es el proceso mediante el cual las poblaciones de organismos experimentan cambios genéticos a lo largo de sucesivas generaciones
Diferencia con el desarrollo individual
Los cambios evolutivos son heredables y se acumulan con el tiempo, a diferencia del desarrollo individual en los seres humanos
La teoría de la evolución de Charles Darwin postula que todas las especies de seres vivos han evolucionado a partir de un antepasado común mediante un proceso de selección natural
La selección natural es un mecanismo esencial de la evolución que favorece la supervivencia y reproducción de los individuos con características más ventajosas para su entorno
Síntesis Moderna
La comprensión moderna de la evolución, conocida como la Síntesis Moderna, combina la teoría de Darwin con los avances en genética
La evolución es impulsada por cuatro procesos principales: mutación, selección natural, deriva génica y flujo genético
Las mutaciones son alteraciones en la secuencia de ADN que pueden ser causadas por errores en la replicación o por factores ambientales
Las mutaciones son esenciales para la evolución ya que introducen nueva variabilidad genética en una población
Aunque muchas mutaciones son neutrales o perjudiciales, algunas pueden conferir ventajas adaptativas y contribuir a la evolución de nuevas características en una especie
La evolución puede conducir a cambios morfológicos significativos en las especies, como la transición de los ojos laterales a una posición frontal en algunos animales
La evolución ha permitido a ciertas especies desarrollar nuevas capacidades fisiológicas, como la fotosíntesis en bacterias y plantas
Las mutaciones pueden influir en el comportamiento de las especies, como en el caso de algunas aves que practican el parasitismo de puesta