El desarrollo sostenible busca equilibrar crecimiento económico, conservación ambiental y equidad social. Enfrenta desafíos éticos como la pobreza y la degradación ambiental, promoviendo una economía centrada en el bienestar humano y la justicia. La ética guía hacia un desarrollo consciente y sostenible, respetando los límites ecosistémicos y fomentando la justicia social.
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El desarrollo sostenible busca armonizar las necesidades presentes y futuras a través de una estrategia integral
El desarrollo sostenible implica un equilibrio entre el crecimiento económico, la conservación del medio ambiente y la equidad social
El desarrollo sostenible surge como respuesta a la creciente conciencia sobre los impactos ambientales negativos de la actividad humana
Uno de los principios del desarrollo sostenible es la protección y restauración de ecosistemas
Otro principio del desarrollo sostenible es la promoción de condiciones laborales seguras y justas
La responsabilidad social empresarial es un principio clave del desarrollo sostenible
El desarrollo sostenible también enfatiza en el fomento de tecnologías ambientalmente amigables
Uno de los desafíos éticos del desarrollo en el siglo XXI es la persistencia de la pobreza y la inseguridad social
Otro desafío ético es la degradación ambiental y las crisis económicas recurrentes
La crisis humana y ambiental demanda una reflexión ética y una acción decidida
La ética debe establecer normas universales que respeten la dignidad humana y promuevan la justicia
La ética debe inspirar la creación de nuevos paradigmas de pensamiento que rechacen la visión instrumental de la naturaleza
La ética aboga por un desarrollo medido no solo en términos de riqueza material, sino también en términos de bienestar colectivo y sostenibilidad a largo plazo