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Los derechos adquiridos y el principio de irretroactividad de la ley son fundamentales en la seguridad jurídica. En Colombia, la protección de estos derechos y el mínimo vital garantizan la dignidad humana y la igualdad de oportunidades. La jurisprudencia constitucional refuerza la inmutabilidad de los derechos frente a cambios legislativos y asegura condiciones de vida dignas a través del salario mínimo.
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Los derechos adquiridos son aquellos que se han consolidado en el patrimonio de una persona, ya sea física o jurídica
Los derechos adquiridos están protegidos contra la arbitrariedad de quien los otorgó o los reconoció
Los derechos adquiridos no pueden ser alterados o revocados por leyes nuevas
Un derecho adquirido es una ventaja o facultad que ya forma parte del patrimonio de una persona, mientras que una expectativa representa la posibilidad de que un derecho se materialice en el futuro
Los derechos adquiridos deben estar protegidos de cualquier legislación posterior que intente modificarlos
Las expectativas no tienen la misma protección legal que los derechos adquiridos, ya que no se han convertido en derechos plenos y efectivos
El principio de irretroactividad de la ley prohíbe que las leyes tengan efectos sobre situaciones jurídicas ya consumadas
Existen excepciones al principio de irretroactividad, como el principio de favorabilidad en materia penal
El enfoque garantista del principio de favorabilidad tiene como fin último la protección de los derechos humanos y la justicia en el tratamiento de los individuos ante la ley
El principio del mínimo vital obliga al Estado a garantizar que los trabajadores reciban una remuneración que les permita cubrir sus necesidades básicas y las de su familia
La Corte Constitucional ha interpretado el principio del mínimo vital de manera amplia, incluyendo no solo las necesidades básicas, sino también el acceso a servicios esenciales
El mínimo vital es esencial para asegurar que todos los ciudadanos tengan las condiciones materiales necesarias para vivir con dignidad
El principio del mínimo vital trasciende la mera subsistencia, buscando promover la igualdad de oportunidades y la justicia social
El mínimo vital deriva directamente de los principios de dignidad humana y del Estado Social de Derecho
El mínimo vital es la base para el desarrollo de políticas públicas y legislación en áreas como los subsidios de desempleo, que buscan proporcionar un soporte económico básico a quienes se encuentran sin trabajo