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La Ilustración, según Immanuel Kant, es el proceso de superar la minoría de edad intelectual, fomentando el uso independiente del entendimiento. La pereza y la cobardía son barreras que mantienen a muchos en dependencia intelectual, mientras que la libertad de pensamiento y la distinción entre el uso público y privado de la razón son cruciales para el avance del conocimiento y la crítica de dogmas, especialmente en el ámbito religioso. Kant ve la Ilustración como un derecho inherente y un proceso evolutivo esencial para el progreso humano.
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La Ilustración es el proceso por el cual el ser humano deja atrás su minoría de edad y comienza a hacer uso de su entendimiento de manera independiente
Pereza y cobardía
La pereza y la cobardía son las principales causas de la dependencia intelectual, ya que muchos individuos eligen permanecer en un estado de comodidad intelectual
Existencia de "tutores"
La existencia de "tutores", como figuras de autoridad, refuerza la dependencia intelectual al dirigir y tomar decisiones en lugar de la persona
La transición hacia la Ilustración personal es un desafío debido a la falta de práctica en el pensamiento autónomo y la adherencia a dogmas y fórmulas
La Ilustración de la sociedad es un proceso lento y complejo, pero inevitable si se permite la libertad de pensamiento
Algunos tutores, al liberar su propio entendimiento, promueven la valoración de la razón y la autonomía intelectual
Algunos tutores pueden resistirse al cambio, pero eventualmente los prejuicios y errores que promueven se vuelven insostenibles y la Ilustración avanza gradualmente
Para Kant, la libertad es esencial para la Ilustración, especialmente la libertad de hacer uso público de la razón en todos los campos del conocimiento
Aunque el uso privado de la razón puede estar restringido en ciertos contextos profesionales o civiles, el uso público debe ser siempre libre y sin restricciones
La libertad en el uso público de la razón permite a los individuos, como académicos o expertos, contribuir al discurso público y al avance del conocimiento sin comprometer sus responsabilidades profesionales
Kant argumenta que los clérigos deben predicar de acuerdo con los dogmas de su iglesia (uso privado de la razón), pero también tienen la libertad y el deber de hacer uso público de su razón al cuestionar y debatir críticamente estos dogmas
La práctica de cuestionar y debatir críticamente los dogmas religiosos contribuye al progreso de la Ilustración y refleja la distinción entre el uso privado y público de la razón
Kant sostiene que cualquier contrato social que intente limitar la Ilustración y el progreso intelectual de la humanidad es imposible y nulo, ya que va en contra de la naturaleza humana de buscar el desarrollo y la mejora continua
Las generaciones futuras tienen el derecho inherente de rechazar acuerdos que obstaculicen su libertad de pensamiento y el avance hacia una mayor Ilustración
Kant concluye que su época no ha alcanzado una Ilustración completa, pero es definitivamente una época de Ilustración
Gobernantes progresistas, como Federico II de Prusia, promueven la libertad de pensamiento y religión, demostrando que la libertad no es incompatible con el orden público
La Ilustración es un proceso evolutivo que depende de la libertad de los individuos para explorar y expresar sus ideas, lo que a su vez fomenta el progreso y la mejora de la sociedad en su conjunto