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La morfología de los sustantivos en español abarca el género y número, elementos clave para la concordancia en la oración. Se clasifican en masculinos y femeninos, y pueden ser singulares o plurales. Además, se distinguen semánticamente en comunes, propios, concretos, abstractos, contables, no contables, individuales y colectivos. La formación del plural sigue reglas específicas, y existen casos especiales como homónimos y heterónimos que enriquecen el idioma.
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La variabilidad morfológica en género y número permite que los sustantivos concuerden dentro de la oración
Morfemas específicos para marcar el género
Los sustantivos pueden ser clasificados en género masculino y femenino mediante morfemas específicos
Invariabilidad en género
Algunos sustantivos no presentan variación en género, como "mesa" (femenino) o "libro" (masculino)
Los sustantivos que denotan seres con sexo biológico pueden variar en género mediante diferentes mecanismos, como morfemas flexivos, sufijos, cambio léxico o concordancia en casos de género común
Los sustantivos se pueden clasificar en nombres comunes, que se refieren a clases de seres, y nombres propios, que se refieren a entidades individualizadas
Los sustantivos se pueden clasificar en nombres concretos, que se refieren a entidades perceptibles, y nombres abstractos, que se refieren a conceptos intangibles
Los sustantivos se pueden clasificar en nombres contables, que se pueden enumerar individualmente, y nombres no contables, que se cuantifican de forma masiva
Los sustantivos se pueden clasificar en nombres individuales, que se refieren a una entidad única, y nombres colectivos, que se refieren a un grupo de entidades
Las palabras se organizan en categorías gramaticales, como sustantivos y adjetivos, que pueden llevar morfemas flexivos para indicar género y número
Los verbos pueden variar en forma para expresar persona, número, tiempo, modo y aspecto
Algunas categorías gramaticales, como adverbios, preposiciones y conjunciones, no presentan flexión
Las interjecciones, que expresan emociones o llamados, constituyen una categoría aparte en la clasificación gramatical
El número gramatical indica la cantidad de entidades que un sustantivo representa, pudiendo ser singular o plural
Morfemas "-s" y "-es"
Los morfemas "-s" y "-es" se añaden a los sustantivos para formar el plural, siguiendo reglas específicas
Reglas para añadir "-s" o "-es"
Los sustantivos que terminan en vocal átona o "-é" tónica añaden "-s", mientras que los que terminan en vocal tónica distinta de "-é" suelen llevar "-es"
Plural de sustantivos que acaban en consonante
Los sustantivos que acaban en consonante forman el plural con "-es"
Algunos sustantivos son invariables y se usan solo en singular o plural, como "salud" o "gafas"
Los homónimos son palabras que cambian de significado según su género, como "el capital" (dinero) y "la capital" (ciudad)
Los heterónimos son palabras distintas para cada género, como "caballo" y "yegua"
Las variaciones en género y significado de los sustantivos aportan riqueza al idioma y pueden ser un reto en el aprendizaje de la morfología y semántica