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La locura en las obras de Cervantes, como 'El licenciado Vidriera' y 'Don Quijote', sirve de espejo crítico para la sociedad del siglo XVII. A través de personajes como Tomás Rodaja y Alonso Quijano, se exploran temas como la influencia de la literatura en la percepción de la realidad, la construcción de la identidad y la crítica a los ideales caballerescos. Estas narrativas no solo entretienen, sino que también invitan a la reflexión sobre la humanidad y sus imperfecciones.
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Tomás Rodaja sufre una psicosis después de ingerir una poción y se convence de que es un hombre de vidrio, lo que le permite criticar la sociedad española del Siglo de Oro
La obsesión de Alonso Quijano con los libros de caballerías
La lectura compulsiva de libros de caballerías lleva a Alonso Quijano a perder el contacto con la realidad y a reinventarse como Don Quijote
Las aventuras quijotescas de Don Quijote
Armado como un caballero andante, Don Quijote se embarca en una serie de aventuras que satirizan la tradición caballeresca y reflexionan sobre los efectos de la literatura en la percepción y conducta humanas
Cervantes utiliza la locura de sus personajes para criticar la sociedad española del siglo XVII y exponer sus contradicciones, injusticias y debilidades
La lectura compulsiva de libros de caballerías lleva a Don Quijote a confundir lo ficticio con lo real, lo que plantea preguntas sobre la responsabilidad del lector y del escritor en la distinción entre la imaginación y la realidad
La autoinvención de Alonso Quijano como Don Quijote
Alonso Quijano se reinventa a sí mismo como Don Quijote y crea una figura idealizada, reflejando la búsqueda humana de significado y la influencia de la cultura y la literatura en la identidad
La figura de Dulcinea del Toboso
Don Quijote crea una figura idealizada, Dulcinea del Toboso, a quien dedica sus gestas caballerescas, explorando cómo la identidad puede ser influenciada por aspiraciones internas y factores externos
Cervantes cuestiona la utilidad y la integridad educativa de los libros de caballerías y desafía a los lectores a ser críticos con la información que consumen