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La transición de la sociedad estamental a una estructura de clases marcó el fin del Antiguo Régimen. Revoluciones políticas y la Revolución Industrial transformaron la economía feudal en un sistema capitalista, dando poder a la burguesía y sentando las bases de la sociedad moderna. Los regímenes parlamentarios comenzaron a desafiar la monarquía absoluta, abriendo camino a la democracia y a la participación política más amplia.
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Las revoluciones políticas como la Francesa y la Americana desafiaron el absolutismo y la estructura estamental del Antiguo Régimen
La Revolución Industrial inició una era de cambios económicos y sociales sin precedentes en Europa
Los eventos del siglo XVIII condujeron a la instauración de regímenes constitucionales en Europa
Durante el Antiguo Régimen, la sociedad estaba estratificada en tres estamentos: el clero, la nobleza y el tercer estado o pueblo llano
La economía del Antiguo Régimen era mayoritariamente agrícola, con la mayoría de la población dedicada a la agricultura de subsistencia y la ganadería
La monarquía absoluta era el sistema político dominante en Europa durante el Antiguo Régimen
La población europea durante el Antiguo Régimen atravesó distintas fases demográficas, incluyendo un crecimiento moderado en el siglo XVI y un notable crecimiento en el XVIII
El aumento poblacional en el siglo XVIII incrementó la demanda de alimentos y estimuló la producción agrícola en Europa
La productividad agrícola en el Antiguo Régimen era limitada por el atraso tecnológico, la dependencia de las condiciones climáticas y el sistema de propiedad señorial
La economía del Antiguo Régimen estaba dominada por una industria artesanal sujeta a regulaciones gremiales y un comercio interior restringido a mercados locales y ferias periódicas
El comercio internacional experimentó un auge en el siglo XVIII, impulsado por la expansión colonial y el creciente consumo de bienes exóticos
A mediados del siglo XVIII, la política económica mercantilista comenzó a ser cuestionada, dando paso a las primeras teorías económicas liberales que abogaban por el libre comercio y la competencia