El Helenismo y la expansión de Alejandro Magno transformaron el mundo antiguo, extendiendo la cultura griega desde Egipto hasta la India. La fundación de ciudades como Alejandría y los avances en filosofía y ciencia marcaron la era. Tras la muerte de Alejandro, sus generales dividieron su imperio, dando origen a reinos helenísticos que mantuvieron la influencia griega hasta la llegada de Roma.
Mostrar más
La unificación de las polis griegas y la conquista de Persia por parte de Filipo II y Alejandro Magno marcaron el inicio de la era helenística
Educación de Alejandro Magno
Alejandro Magno fue educado por Aristóteles y heredó el trono macedonio de su padre Filipo II
Conquistas militares de Alejandro Magno
A través de sus campañas militares, Alejandro Magno extendió el dominio macedonio sobre un vasto territorio y difundió la cultura y el idioma griegos
Visión de un imperio mundial unificado
Alejandro Magno tenía la visión de un imperio unificado cultural y políticamente, lo que contribuyó a la difusión del helenismo
Alejandro Magno fundó la ciudad de Alejandría en Egipto, que se convirtió en un importante centro de comercio, conocimiento y cultura en la era helenística
La cultura helenística se caracterizó por la fusión de las tradiciones griegas con las culturas de Oriente Medio y Asia
Modelos urbanos griegos
Las ciudades helenísticas seguían el modelo urbano griego, con un enfoque en el aprendizaje y la cultura
Centros de aprendizaje y cultura
Las ciudades helenísticas, como Alejandría y Pérgamo, eran centros importantes de aprendizaje y cultura en la era helenística
Biblioteca de Alejandría
La Biblioteca de Alejandría se convirtió en el centro de estudios más importante del mundo antiguo, atrayendo a eruditos de renombre
Filosofía helenística
La filosofía helenística vio el surgimiento de figuras como Epicuro y Zenón de Citio
Avances en ciencia
La ciencia helenística vio avances en áreas como la matemática y la astronomía, con figuras como Arquímedes y Euclides
Tras la muerte de Alejandro Magno, sus generales lucharon por el control del imperio en la Guerra de los Diádocos
El imperio de Alejandro Magno se dividió en varios reinos helenísticos, como el Reino Ptolemaico y el Imperio Seleucida
Los reinos helenísticos mantuvieron la influencia griega y adaptaron la cultura helenística a sus contextos locales
A lo largo del siglo II a.e.c., los reinos helenísticos comenzaron a sucumbir ante el poder emergente de Roma, que finalmente absorbió estos territorios y heredó el legado cultural helenístico