La evolución histórica de la infancia revela cambios significativos en la percepción y tratamiento de los niños. En la antigua Grecia y Roma, la educación y los derechos variaban ampliamente. La Edad Media los consideraba pequeños adultos, pero la Modernidad trajo un enfoque humanista. La Revolución Industrial, sin embargo, llevó a la explotación laboral infantil, contrarrestada más tarde por leyes de protección. Actualmente, los desafíos incluyen desigualdades en salud y educación, y la Convención sobre los Derechos del Niño busca garantizar su bienestar y desarrollo.
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La educación de los niños en la antigua Grecia variaba según la ciudad-estado y se enfocaba en las ciencias y las artes en Atenas y en la formación militar en Esparta
En la antigua Roma, los padres tenían un control casi absoluto sobre sus hijos gracias a la "patria potestad"
A pesar de la educación en la antigua Grecia y la "patria potestad" en la antigua Roma, la infancia no era idílica para los niños de clases bajas y las niñas, quienes a menudo eran marginadas o abandonadas
Durante la Edad Media, los niños eran vistos como pequeños adultos y la infancia era una etapa breve y dura
Al final de la Edad Media, se comenzó a valorar la educación infantil y surgieron figuras como el aprendiz y las primeras instituciones educativas para la nobleza y la burguesía emergente
La Edad Moderna trajo consigo un cambio en la percepción de la infancia, influenciada por el humanismo renacentista y la valoración de la educación
La Ilustración y la Revolución Francesa enfatizaron la importancia de los derechos individuales, incluyendo los de los niños
La Revolución Industrial expuso a muchos niños a la explotación laboral, lo que llevó a la creación de leyes de protección infantil
Las atrocidades de la Primera Guerra Mundial contra los niños llevaron a la adopción de la Declaración de Ginebra de 1924 y, más tarde, a la Convención sobre los Derechos del Niño de 1989, que estableció la igualdad de derechos para todos los niños y niñas
El aumento de hogares monoparentales y reconstituidos ha alterado los roles tradicionales y generado la necesidad de apoyo externo, como el proporcionado por las escuelas infantiles
La urbanización ha reducido los espacios seguros para el juego de los niños
La necesidad de que ambos padres trabajen puede limitar su tiempo con los hijos, afectando su crianza y educación