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La Constitución de 1812, conocida como 'La Pepa', marcó un hito en la historia de España al establecer una monarquía constitucional y desafiar el Antiguo Régimen. Este documento fue el resultado de intensos debates en las Cortes de Cádiz, donde liberales y absolutistas confrontaron sus visiones políticas. A pesar de la restauración del absolutismo con Fernando VII, la 'Pepa' inspiró movimientos constitucionales y dejó un legado de aspiraciones liberales.
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La Constitución de 1812 surgió en un periodo de agitación política y social en España, marcado por la invasión napoleónica y el vacío de poder dejado por la captura de la familia real
Sustitución de la Junta Central Suprema por el Consejo de Regencia
La Junta Central Suprema, creada para dirigir la resistencia contra los franceses, fue sustituida en 1810 por un Consejo de Regencia que convocó a las Cortes Generales y Extraordinarias en Cádiz
Influencia de las ideas liberales en Cádiz
Cádiz se convirtió en un hervidero de ideas liberales, acogiendo a políticos, intelectuales y comerciantes
Facciones políticas presentes en las Cortes
Las Cortes de Cádiz se convirtieron en el escenario de intensos debates entre distintas facciones políticas, como los liberales y los absolutistas
Participación limitada de las colonias americanas
Los diputados de las colonias americanas tuvieron una influencia limitada en el proceso constituyente debido a la creciente tensión independentista en sus territorios
La Constitución de 1812 estableció un marco de monarquía constitucional, con la soberanía nacional y la división de poderes como pilares del nuevo Estado
Igualdad ante la ley
La Constitución de 1812 reconoció la igualdad ante la ley como un derecho fundamental
Libertad de prensa
La Constitución de 1812 promovió la libertad de prensa como una de las reformas liberales
La Constitución de 1812 limitó el poder del rey, otorgándole un rol ejecutivo sujeto a la supervisión de las Cortes
La Constitución de 1812 significó el comienzo del constitucionalismo en España y un desafío al Antiguo Régimen
La Constitución de 1812 inspiró movimientos constitucionales en América Latina y Europa, convirtiéndose en un símbolo de las aspiraciones liberales y democráticas
Con la vuelta al trono de Fernando VII en 1814, se produjo la derogación de la Constitución y el inicio del Sexenio Absolutista
El pronunciamiento militar de Rafael del Riego forzó la restauración de la Constitución de 1812 y el inicio del Trienio Liberal
La Década Ominosa fue una era de represión y reafirmación del Antiguo Régimen, aunque las conspiraciones y el descontento liberal continuaron, sentando las bases para futuras transformaciones políticas en España