Infancia y Desarrollo Temprano
En la primera etapa del ciclo vital, que comprende el primer año de vida, el infante desarrolla la confianza básica cuando recibe cuidado constante y amoroso, principalmente de figuras parentales. La etapa de los 1 a los 3 años se enfoca en el desarrollo de la autonomía, a medida que el niño comienza a adquirir control sobre sus funciones corporales y a moverse independientemente. Entre los 3 y los 6 años, en el período preescolar, la iniciativa se fomenta a través de la exploración y la capacidad de planificar y llevar a cabo tareas. Estas etapas tempranas son cruciales para la formación de virtudes como la esperanza, la voluntad y el propósito.Desarrollo Durante la Escolaridad y Adolescencia
La etapa de la escolaridad, que abarca de los 6 a los 12 años, se caracteriza por el desarrollo de la industria, donde el niño se esfuerza por alcanzar logros y desarrollar competencias sociales y académicas. La adolescencia, que se extiende aproximadamente de los 13 a los 20 años, es un tiempo de formación de identidad, en el cual el joven experimenta con distintos roles y busca definir su orientación vocacional y sexual. La resolución exitosa de estas etapas conduce a la adquisición de las virtudes de competencia y fidelidad, esenciales para la transición a la adultez.Adultez y Madurez
La etapa del adulto joven, que va de los 20 a los 40 años aproximadamente, se centra en la formación de relaciones íntimas y la toma de decisiones significativas en lo personal y profesional. La crisis de la adultez media, generatividad versus estancamiento, se manifiesta en el deseo de contribuir al bienestar de las generaciones futuras y en la búsqueda de dejar un legado. La última etapa, la integridad del yo versus la desesperación, se presenta a partir de los 65 años y se enfoca en la reflexión sobre la vida y la aceptación de la mortalidad. La sabiduría es la virtud que emerge al superar con éxito esta última fase del desarrollo.Virtudes y Crisis en el Ciclo Vital
En el modelo de Erikson, cada etapa del ciclo vital está vinculada con una virtud que se desarrolla al resolver de manera efectiva la crisis psicosocial pertinente. Estas virtudes, que incluyen la esperanza, la voluntad, el propósito, la competencia, la fidelidad, el amor, el cuidado y la sabiduría, son atributos clave que el individuo cultiva y que le facilitan la navegación por los retos de la existencia. La teoría de Erikson enfatiza la relevancia de un ambiente propicio y la capacidad de adaptación y crecimiento personal a lo largo de las distintas etapas del ciclo vital.