El Papel de las Representaciones Mentales en la Cognición
Las representaciones mentales son estructuras cognitivas que posibilitan la simulación y manipulación de la realidad en la mente. Piaget sostiene que la capacidad de formar representaciones internas de la realidad es un hito en el desarrollo cognitivo, que transforma la interacción del sujeto con el mundo de una basada en lo sensoriomotriz a una de carácter conceptual. Jerome Bruner argumenta que el desarrollo cognitivo implica aprender a manejar distintas formas de representación y a traducir entre ellas. Sigmund Freud distingue entre representaciones-cosa, que están ligadas a lo visual e inconsciente, y representaciones-palabra, asociadas a lo acústico y a los niveles preconsciente y consciente. Philip Johnson-Laird propone que la mente opera con representaciones proposicionales, modelos mentales e imágenes para razonar y hacer inferencias sobre el mundo, lo cual es esencial para la manipulación de conceptos y la resolución de problemas en la realidad.El Lenguaje como Manifestación Suprema de la Función Simbólica
El lenguaje es la manifestación más compleja y desarrollada de la función simbólica, siendo un sistema de signos y reglas que permite la comunicación y la representación del mundo exterior. Según el neuropsicólogo Alexander Luria, el lenguaje es fundamental para procesos como la imitación, el juego simbólico y la creación de imágenes, tanto mentales como materiales. La adquisición y el desarrollo del lenguaje están estrechamente vinculados a la capacidad de formar representaciones mentales complejas y organizadas, como esquemas y guiones, que estructuran nuestra comprensión de eventos y guían nuestras expectativas y acciones. Estas estructuras narrativas son esenciales para entender cómo ocurren los eventos en el mundo y para comunicar experiencias y conocimientos de manera efectiva.Estrategias para la Rehabilitación del Lenguaje Basadas en la Función Simbólica
En la rehabilitación del lenguaje, es crucial evaluar y comprender el estado de la función simbólica del individuo, incluyendo aspectos como la imitación diferida, el juego simbólico, las imágenes mentales y el dibujo. Es esencial determinar si el sistema cognitivo del paciente utiliza esquemas y guiones para construir una comprensión del mundo. Basándose en esta evaluación, se pueden diseñar intervenciones lingüísticas que aprovechen la capacidad simbólica del individuo, promoviendo así el desarrollo y la mejora del lenguaje y la comunicación. Estas estrategias deben ser personalizadas y pueden incluir actividades que estimulen la creación y el uso de símbolos y signos, así como ejercicios que fortalezcan la capacidad de formar y manipular representaciones mentales.