La historia de las teorías evolutivas revela cómo hemos pasado del fijismo y creacionismo a comprender la biodiversidad a través de la selección natural y la genética. Figuras como Darwin, Wallace y Dawkins han sido clave en este desarrollo, ofreciendo perspectivas que van desde la selección natural hasta la visión genocéntrica de la evolución. Los fósiles, la anatomía comparada y la biología molecular son algunas de las evidencias que respaldan la teoría evolutiva.
Mostrar más
En el siglo XIX, el fijismo y el creacionismo dominaban el pensamiento sobre la diversidad biológica, atribuyendo la existencia de las especies a actos divinos y sosteniendo que estas no sufrían cambios a lo largo del tiempo
Influencia del libro del Génesis en la Biblia
Estas teorías se basaban en interpretaciones literales de textos religiosos, especialmente del libro del Génesis en la Biblia
Aunque figuras como Richard Dawkins, un evolucionista moderno, han criticado el fijismo y el creacionismo, contribuyendo al avance del neodarwinismo
El descubrimiento de fósiles planteó un desafío a la teoría del fijismo, al evidenciar la existencia de especies que ya no se encontraban vivas
Georges Cuvier propuso la teoría del catastrofismo para explicar la presencia de fósiles, argumentando que las catástrofes naturales eran responsables de la extinción masiva de especies
Aunque esta teoría fue un paso importante para reconocer la extinción de especies, fue superada por la teoría de la evolución, que ofrece una explicación más coherente y basada en evidencias
Jean Baptiste de Lamarck propuso la teoría del lamarckismo, que sugería que los organismos podían pasar a su descendencia los rasgos adquiridos durante su vida
Lamarck creía que los cambios en el ambiente llevaban a los seres vivos a adaptarse y que la vida evolucionaba de formas simples a más complejas
Aunque el lamarckismo ha sido desacreditado en muchos aspectos por la genética moderna, fue una teoría pionera que abrió camino al pensamiento evolutivo
Charles Darwin y Alfred Russel Wallace formularon la teoría de la evolución por selección natural, que propone que la variabilidad entre los individuos de una especie es el resultado de mutaciones genéticas aleatorias y que el entorno favorece la supervivencia y reproducción de aquellos mejor adaptados
Darwin expuso esta teoría en su obra "El Origen de las Especies", que revolucionó la biología y proporcionó una explicación científica para la diversidad de la vida en la Tierra
Científicos como Ronald Fisher, J.B.S. Haldane, Sewall Wright y Theodosius Dobzhansky han hecho contribuciones fundamentales a esta teoría
El neodarwinismo, o teoría sintética de la evolución, es la síntesis de la teoría de Darwin de la selección natural con los descubrimientos genéticos del siglo XX
Esta teoría moderna rechaza la herencia de los caracteres adquiridos y enfatiza el papel de las mutaciones y la recombinación genética como fuentes de variabilidad
La selección natural actúa sobre esta variabilidad, resultando en cambios en las frecuencias de alelos dentro de las poblaciones y, eventualmente, en la evolución de nuevas especies
Richard Dawkins propuso una visión genocéntrica de la evolución, argumentando que los genes son las unidades fundamentales de selección natural
Según Dawkins, los genes actúan de manera egoísta para asegurar su propia supervivencia y replicación, y los organismos son simplemente vehículos que facilitan la transmisión de estos genes
Esta perspectiva ha influido en la comprensión de la evolución y el comportamiento animal, y ha generado debates sobre la naturaleza de la selección y la adaptación
Las pruebas anatómicas y paleontológicas, como los fósiles de Archaeopteryx, demuestran la existencia de formas transicionales entre grupos de organismos
Las pruebas embriológicas muestran similitudes en el desarrollo temprano de diferentes especies, lo que indica un origen común
Las pruebas biogeográficas y moleculares, incluyendo el análisis comparativo de ADN y proteínas, permiten establecer relaciones filogenéticas entre las especies