La Evaluación de 360 grados es una metodología integral para el análisis del desempeño laboral. Incluye la recolección de opiniones de supervisores, colegas y subordinados, así como la autoevaluación del empleado. Este proceso abarca desde la identificación de competencias hasta la aplicación de cuestionarios y el análisis de resultados para fomentar el crecimiento profesional y la mejora continua en la empresa.
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La Evaluación de 360 grados es una herramienta que permite recolectar retroalimentación sobre el desempeño de un empleado desde múltiples fuentes
Supervisores, pares, subordinados y clientes
La Evaluación de 360 grados involucra la recolección de retroalimentación de diferentes fuentes, como supervisores, pares, subordinados y clientes
Autoevaluación del empleado
La Evaluación de 360 grados también incluye la autoevaluación del empleado
La Evaluación de 360 grados proporciona una perspectiva amplia y equilibrada del rendimiento y habilidades del empleado, lo que es esencial para su desarrollo profesional
La implementación de la Evaluación de 360 grados requiere una planificación cuidadosa y una metodología estructurada
El proceso comienza con la selección de empleados ejemplares
Se realizan entrevistas para identificar las competencias clave del puesto
Se establecen indicadores medibles para las competencias identificadas
Se desarrolla un cuestionario basado en la escala de Likert para evaluar objetivamente las competencias
Se realiza una evaluación piloto del cuestionario para ajustar posibles incongruencias antes de la evaluación final
Los resultados obtenidos son analizados detalladamente para proporcionar retroalimentación constructiva a los empleados
El proceso comienza con la identificación de empleados que muestran un desempeño sobresaliente
Se complementa la selección con entrevistas al supervisor directo para obtener una comprensión más profunda de las habilidades y cualidades necesarias para el éxito en el puesto
Se definen competencias cardinales y específicas para el puesto
Las competencias se convierten en variables observables y cuantificables para facilitar la evaluación objetiva del desempeño
Se elabora un cuestionario detallado utilizando la escala de Likert para medir la frecuencia y calidad de las conductas relacionadas con el trabajo
El cuestionario final se aplica a los mismos participantes para asegurar la consistencia y fiabilidad de la evaluación
Se generan informes individuales que resumen el desempeño y destacan fortalezas y áreas de mejora
Los informes son confidenciales y se utilizan para guiar a los empleados en su desarrollo profesional
Los informes proporcionan una base objetiva para el crecimiento personal y la mejora continua dentro de la organización