Ley de Navegación y Comercio Marítimos

Propósito y Ámbito de Aplicación de la Ley de Navegación y Comercio Marítimos

La Ley de Navegación y Comercio Marítimos de México tiene como finalidad regular las actividades relacionadas con las vías acuáticas de comunicación, la navegación marítima, los servicios marítimos, la marina mercante y el comercio marítimo. Esta legislación excluye expresamente a las embarcaciones de la Armada de México, pertenecientes a la Secretaría de Marina. Se aplica a todos los actos y bienes que tienen relación con el comercio marítimo, con el objetivo de establecer un marco legal que asegure la seguridad en la navegación, la eficiencia en el transporte marítimo y la protección del medio ambiente marino.

Conceptos Fundamentales en la Normativa Marítima

La ley proporciona definiciones claras de términos fundamentales para su correcta interpretación y aplicación. "Secretaría" se refiere a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, entidad encargada de la administración del sector. "Navegación" implica el desplazamiento de embarcaciones a través de cuerpos de agua. "Comercio Marítimo" comprende el transporte marítimo de personas y mercancías, así como otras actividades económicas relacionadas con el mar. "Embarcación" y "Artefacto Naval" son términos que designan a cualquier estructura capaz de flotar y moverse en el agua. "Marina Mercante" se refiere al conjunto de personas y empresas que operan en el sector marítimo comercial. "Contaminación Marina" es la liberación de sustancias o energía en el ambiente marino que resulta perjudicial para los ecosistemas y la salud humana. "Propietario" y "Naviero" identifican a los dueños o responsables de una embarcación o artefacto naval, mientras que "Operador" es quien hace uso de estos sin ser su propietario. "Tratados Internacionales" son acuerdos vinculantes entre México y otros países, y los términos "Desguace" y "Dragado" se refieren a la eliminación y mantenimiento de embarcaciones y vías acuáticas, respectivamente.

Vías Navegables y su Importancia

Las vías generales de comunicación por agua, conocidas como vías navegables, son fundamentales para el transporte marítimo y la economía. Incluyen el mar territorial, la zona económica exclusiva, las aguas marinas interiores, los ríos y lagos aptos para la navegación, y los canales. Estas vías están sujetas a regulaciones específicas que buscan asegurar su uso seguro y eficiente, y son vitales para el desarrollo y mantenimiento del comercio marítimo y las actividades relacionadas.

Competencia Federal y Regulación de Embarcaciones

La jurisdicción federal en México comprende todo lo concerniente a las vías navegables, la navegación y el comercio marítimo dentro de las aguas nacionales. La ley establece regulaciones uniformes para embarcaciones y artefactos navales, con algunas excepciones. Las embarcaciones mexicanas están obligadas a cumplir con la legislación nacional incluso cuando navegan fuera de aguas mexicanas. Por otro lado, las embarcaciones extranjeras deben adherirse a las leyes mexicanas cuando se encuentran en aguas nacionales, garantizando así la soberanía y el cumplimiento de las normativas locales.

La Autoridad Marítima Nacional y sus Facultades

La autoridad marítima en México es ejercida por el Ejecutivo Federal, principalmente a través de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y las capitanías de puerto. La Secretaría tiene facultades extensas, que incluyen la planificación y regulación del transporte marítimo, la participación en tratados internacionales, el abanderamiento de embarcaciones, la concesión de permisos y licencias, y la supervisión de la seguridad marítima. Además, es responsable de la formación profesional y técnica del personal de la marina mercante, la regulación de las tarifas de los servicios marítimos y la aplicación de sanciones ante infracciones a la legislación marítima.

Responsabilidades de las Capitanías de Puerto

Las capitanías de puerto son autoridades locales en cada puerto habilitado y tienen la responsabilidad de registrar embarcaciones, otorgar autorizaciones de navegación, supervisar la seguridad y eficiencia de las operaciones portuarias y de navegación, y coordinar las acciones de auxilio y salvamento marítimo. Además, llevan a cabo inspecciones y certificaciones de seguridad, y colaboran en la investigación de accidentes marítimos, contribuyendo así a la prevención de incidentes y al mantenimiento de altos estándares de seguridad en el ámbito marítimo.