Los carbohidratos son biomoléculas esenciales compuestas por carbono, hidrógeno y oxígeno. Se clasifican en monosacáridos, oligosacáridos y polisacáridos, con funciones clave en el metabolismo energético. Glucosa, fructosa y galactosa son monosacáridos vitales en la dieta humana, mientras que disacáridos y polisacáridos como la sacarosa, lactosa, almidón y celulosa desempeñan roles importantes en la nutrición y estructura celular.
Los monosacáridos son los componentes básicos de los carbohidratos y desempeñan roles fundamentales en el metabolismo energético y como precursores de otras biomoléculas
Los oligosacáridos son compuestos por 2 a 10 monosacáridos unidos por enlaces glucosídicos
Los polisacáridos son polímeros de monosacáridos y pueden contener cientos o miles de unidades
Los monosacáridos pueden existir en formas lineales o en anillos, y su estructura química determina sus propiedades físicas y biológicas
Los monosacáridos exhiben isomería, que puede ser óptica, estructural y aldosa-cetosa
Los carbohidratos se diferencian por su grupo funcional, siendo las aldosas y cetosas las más comunes
Los carbohidratos, en particular la glucosa, son una fuente de energía esencial para las células
Los monosacáridos pueden ser utilizados como precursores para la síntesis de otras biomoléculas
Los carbohidratos, en forma de disacáridos y polisacáridos, son importantes para el almacenamiento de energía y la estructura celular