Contexto Europeo y Español en la Época Prehispánica

La conquista de América por España marcó un antes y un después en la historia mundial. Desde el contexto europeo prehispánico, pasando por los viajes de exploración y la caída de Tenochtitlán, hasta la imposición de la fe católica y la estructura política del México virreinal. La diversidad racial y las reformas Borbónicas jugaron un papel crucial en la economía y el comercio exterior, sentando las bases para futuros movimientos de independencia.

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Contexto Europeo y Español en la Época Prehispánica

Antes del descubrimiento de América, Europa atravesaba un periodo de profundos cambios que tendrían un impacto duradero en el mundo. La expansión otomana amenazaba las rutas comerciales tradicionales, lo que impulsó la búsqueda de nuevas vías hacia Asia. El Renacimiento florecía, reviviendo el interés por las artes y las ciencias clásicas y fomentando un espíritu de exploración y descubrimiento. En España, tras la Reconquista y la unificación de los reinos de Castilla y Aragón, se expulsaron a judíos y musulmanes, consolidando un estado católico y monárquico. En este contexto, la corona española patrocinó el viaje de Cristóbal Colón, que culminaría con el encuentro de dos mundos.

Escena histórica al aire libre con hombre en armadura y otro en túnica frente a multitud, construcción mesoamericana de fondo y objetos ceremoniales en primer plano.

Los Viajes de Exploración y la Conquista de Mesoamérica

La era de la exploración española en América se inició con la colonización de las islas del Caribe y se expandió con la expedición de Hernán Cortés a Mesoamérica en 1519. Cortés desembarcó en Veracruz y estableció alianzas estratégicas con pueblos indígenas descontentos con el dominio mexica, como los tlaxcaltecas. La figura de Malintzin, o La Malinche, fue crucial como intérprete y consejera. Los regalos y señales de sumisión de Moctezuma II, emperador mexica, malinterpretados por los españoles como actos de vasallaje, incentivaron la ambición de Cortés y sus hombres, precipitando el conflicto armado.

La Caída de Tenochtitlán y el Fin del Dominio Mexica

La conquista de Tenochtitlán en 1521 fue un episodio clave en la expansión española en América. Pedro de Alvarado jugó un papel importante en la captura de la ciudad, mientras que Hernán Cortés orquestó el asedio que cortó los suministros de agua y alimentos. La resistencia mexica, liderada por Cuauhtémoc, fue feroz pero finalmente insuficiente. Tras la caída de la ciudad, Cuauhtémoc fue capturado y más tarde ejecutado, marcando el fin de la resistencia mexica. La conquista de Mesoamérica se consolidó con la subyugación de los pueblos indígenas y la expansión del dominio español hacia Aridoamérica y Oasisamérica.

La Conquista Espiritual y la Imposición de la Fe Católica

La conquista de América no fue solo militar, sino también espiritual. La imposición del catolicismo comenzó con la evangelización de la nobleza indígena y continuó con la llegada de misioneros de diversas órdenes religiosas. Se prohibieron las prácticas religiosas prehispánicas y se construyeron iglesias sobre templos indígenas. Sin embargo, se produjo un sincretismo religioso, en el que elementos de las creencias indígenas se integraron en las prácticas católicas, dando lugar a expresiones religiosas únicas en la región.

México Virreinal: Estructura Política y Administrativa

La victoria española en Tenochtitlán llevó a la creación del Virreinato de Nueva España, con una jerarquía de autoridades que reflejaba la estructura política de la metrópoli. El rey de España, representado por el virrey, era la máxima autoridad, seguido por gobernadores y alcaldes en las distintas regiones. La Casa de Austria, o los Habsburgo, gobernó durante este periodo, caracterizado por una administración centralizada y una división territorial que respondía a criterios demográficos y económicos, con diferencias marcadas entre las regiones más desarrolladas y las periféricas.

Diversidad Racial y Social en el México Virreinal

La sociedad novohispana era racial y socialmente diversa. Los españoles se clasificaban en peninsulares y criollos, mientras que los indígenas constituían la mayoría de la población. La interacción entre estos grupos y otros, como los africanos traídos como esclavos, dio lugar a un sistema de castas con una jerarquía social basada en la ascendencia y el color de la piel. Esta diversidad racial y cultural fue una característica distintiva de la sociedad colonial en Nueva España.

Economía y Comercio Exterior en el México Virreinal

La economía del Virreinato de Nueva España estaba integrada en el sistema mercantilista español, con una red comercial que conectaba Europa, América y Asia. La plata novohispana se convirtió en la moneda de intercambio global, facilitando el comercio transpacífico. Las reformas Borbónicas del siglo XVIII buscaron modernizar la administración y aumentar los ingresos fiscales, lo que incluyó la expulsión de los jesuitas, la creación de intendencias y la emisión de Vales Reales para financiar la deuda pública.

Cambio y Tensión en el México Colonial Tardío

Las últimas décadas del periodo colonial en México estuvieron marcadas por reformas administrativas y fiscales implementadas por la dinastía Borbón, que transformaron el virreinato en una colonia más directamente controlada por la corona. Estas reformas generaron tensiones y conflictos entre diferentes sectores de la sociedad, exacerbando las desigualdades y el descontento. La difusión de las ideas ilustradas y los ecos de la Revolución Francesa alimentaron un clima de cambio que, junto con las tensiones sociales y raciales, prepararon el terreno para los movimientos de independencia que surgirían en el siglo XIX. Las reformas Borbónicas, aunque buscaban fortalecer el imperio, paradójicamente debilitaron la lealtad a la corona y abrieron la puerta a la independencia.

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