La diversidad celular abarca las células procariotas y eucariotas, diferenciadas por su complejidad y organización. Las eucariotas, con orgánulos especializados como mitocondrias y cloroplastos, son fundamentales en organismos multicelulares, mientras que las procariotas, más simples, son esenciales en ecosistemas. La especialización celular permite funciones vitales como la contracción muscular y la absorción de nutrientes.
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Las células procariotas son estructuras simples que carecen de un núcleo definido y otros orgánulos internos delimitados por membranas, pero aún así son capaces de realizar funciones esenciales para la vida
Tilacoides
Los tilacoides son estructuras presentes en ciertas bacterias fotosintéticas que participan en el proceso de fotosíntesis
Magnetosomas
Los magnetosomas son orgánulos que permiten a las bacterias orientarse en campos magnéticos
Carboxisomas
Los carboxisomas son compartimentos que contienen enzimas para la fijación de dióxido de carbono en algunas bacterias
Las células procariotas son más pequeñas que las células eucariotas, con un tamaño promedio de 1 a 2 µm, pero su complejidad no está directamente relacionada con su tamaño
Las células eucariotas se caracterizan por su organización interna en compartimentos, como el núcleo, el citosol y los orgánulos, que realizan funciones específicas para la vida celular
Núcleo
El núcleo es un compartimento rodeado por una doble membrana que alberga el material genético y coordina actividades celulares esenciales
Citosol
El citosol es la porción líquida del citoplasma que alberga enzimas y el citoesqueleto, proporcionando soporte estructural y facilitando el movimiento celular
Orgánulos Especializados
Los orgánulos como las mitocondrias, los cloroplastos y los lisosomas realizan funciones específicas como la producción de energía, la fotosíntesis y el reciclaje de materiales celulares, respectivamente
Las células eucariotas suelen tener un tamaño que varía entre 10 y 30 µm, pero hay excepciones notables como las neuronas y los óvulos, que pueden ser mucho más grandes
Los organismos unicelulares, especialmente los procariotas, son los más abundantes en la Tierra y desempeñan roles esenciales en los ecosistemas
Los organismos pluricelulares, como animales, plantas y hongos, son menos numerosos pero más complejos, con una gran cantidad de células especializadas en funciones específicas
La forma y la especialización de las células están estrechamente relacionadas con sus funciones específicas, permitiendo la división del trabajo en organismos complejos